espondiloartritis axial

Afrontar la vida diaria y superar el reto de vivir con espondiloartritis

Las enfermedades reumáticas forman parte de las patologías que tienen mayor repercusión sobre la calidad de vida, causando problemas en el día a día de los pacientes, incluyendo las actividades domésticas y laborales. Esta situación se hace especialmente evidente en los pacientes con espondiloartritis.

Espondiloartritis y calidad de vida

Además de la inflamación espinal, la espondiloartritis axial se caracteriza por otro tipo de manifestaciones periféricas, incluyendo problemas en las manos, los ojos o la piel. Esta enfermedad también se puede presentar asociada a otras patologías, como enfermedades cardiovasculares, diabetes, osteoporosis y depresión, entre otras.

A diferencia de la artritis reumatoide y la artritis psoriásica, la espondiloartritis axial produce la formación de hueso y la fusión de las articulaciones sacroilíacas, la columna lumbar y, más tarde, la columna torácica y cervical. Todo ello determina que, si no se controla la enfermedad, pueda ir disminuyendo poco a poco la funcionalidad de todas estas articulaciones.

Solo recientemente, gracias a la utilización de instrumentos capaces de evaluar la calidad de vida de los pacientes con espondiloartritis axial, los médicos han podido adquirir una mejor comprensión de los efectos negativos de la enfermedad. Esto ha permitido una visión más objetiva sobre el tratamiento y sus posibilidades de mejora. De este modo, acudir al fisioterapeuta o a un psicólogo se debe contemplar como opciones para mejorar la vida de los pacientes.

También se ha avanzado en el conocimiento de los patrones que presentan las diferentes enfermedades reumáticas, especialmente en lo referente a sus limitaciones funcionales y las enfermedades asociadas a cada una de ellas.

Espondiloartitis en el ámbito doméstico

Algunos estudios comparativos sobre el impacto de la enfermedad en pacientes con artritis reumatoide, artritis psoriásica y espondiloartritis axial muestran que estos últimos experimentan más dolor y fatiga que el resto.

El dolor es uno de los síntomas característicos de las espondiloartritis y las enfermedades reumáticas, aunque no en todos los pacientes se manifiesta de la misma forma. Muchas personas con enfermedades reumáticas identifican la disminución del dolor como su máxima prioridad en relación con el tratamiento. De este modo, poder realizar las actividades diarias depende en gran medida del nivel de intensidad del dolor y de la reducción que se pueda conseguir con el tratamiento.

Son los síntomas como el dolor, la rigidez y la fatiga asociados con las lesiones óseas que se pueden producir en la columna los que limitan el funcionamiento físico, incluida la capacidad para realizar actividades de la vida diaria, como vestirse, caminar, asearse y comer, entre otras.

Por otro lado, aproximadamente 2 de cada 3 pacientes con espondiloartritis axial experimentan fatiga debido, principalmente, a una menor calidad del sueño. En este sentido, los pacientes con espondiloartritis axial se despiertan una media de 1,5 veces por noche y cerca de la mitad tienen insomnio moderado o severo.

En algunos casos se han producido deformaciones y curvaturas de la columna pueden provocar alteraciones importantes de la imagen corporal, que se asocian a mayores tasas de ansiedad y depresión.

Mejorar en casa

La planificación de las tareas de la casa puede ser muy útil para poder desarrollarlas de la mejor manera. Tomarse el tiempo que haga falta debe ser siempre una premisa indiscutible. Es recomendable espaciar las actividades domésticas y vigilar las posturas que puedan suponer un cansancio y dolor añadidos.

Por supuesto, si es posible, contar con el apoyo y la ayuda necesaria para realizar las tareas más costosas en el ámbito doméstico.

Es recomendable intercalar pequeños ejercicios que ayuden a aliviar las zonas más sobrecargadas. También alternar actividades desestresantes con el trabajo doméstico.

Habrá días mejores y peores. Cuando un día las limitaciones y el dolor son mayores, las cosas se pueden dejar para más adelante.

Espondiloartritis en el ámbito laboral

Las limitaciones físicas de la espondiloartritis axial también pueden afectar de manera importante en el ámbito laboral.

Un diagnóstico precoz puede facilitar la continuidad de una vida productiva en las personas con espondiloartritis axial, aunque algunos trabajos con una elevada carga física deben poder reorientarse.

Mejorar en el ámbito laboral

Como hemos visto, las espondiloartritis pueden ser enfermedades limitantes en el ámbito laboral, especialmente cuando el diagnóstico y el tratamiento no se han producido de manera tan precoz como para evitar lesiones en las articulaciones. Por ello, en trabajos con levantamiento de peso o en los que se lleven a cabo posturas estáticas, especialmente sobre la espalda, es recomendable cambiar de postura, movilizando las articulaciones de manera periódica. También se recomienda hacer una buena planificación de descansos a lo largo de toda la jornada laboral.

Por último, no hay que olvidar que existe una legislación laboral que protege a los trabajadores con enfermedades como la espondiloartritis. Para tener una mejor calidad de vida, se puede valorar un cambio de puesto de trabajo dentro de la empresa o, cuando sea necesario, solicitar una baja por incapacidad temporal.

Todos estos son recursos, como apoyarte de las asociaciones de pacientes, por ejemplo www.espondiloartritisaxial.org, siempre están a disposición de las personas que padecen espondiloartritis, aunque la mayoría seguirá haciendo todo lo posible por tener controlada la enfermedad para disfrutar de una vida activa en todos los ámbitos, también en el laboral.